Los recientes Juegos Olímpicos de París 2024 han sido mucho más que una celebración del deporte; han servido como una pasarela global. En esta edición, a diferencia de otros Juegos, la moda ha tenido una influencia destacada y ha captado la atención mundial. La elección de París, la cuna de la alta costura, ha transformado el escenario olímpico en un desfile de diseño, estilo e impacto en la moda. Desde los trajes para la ceremonia de apertura hasta los uniformes de los atletas, se ha experimentado con materiales innovadores y diseños modernos, sin dejar de lado las tradiciones. Esta combinación de identidad cultural y funcionalidad ha puesto de relieve la influencia y las tendencias actuales de la moda.
Elegancia e Innovación en el Desfile Olímpico
La elegancia y la innovación han sido las protagonistas en estos Juegos Olímpicos, ofreciendo una experiencia única en comparación con otras ediciones, tanto dentro como fuera de los estadios. Uno de los principales patrocinadores, el grupo LVMH, líder mundial en artículos de lujo, ha tenido una destacada presencia. Marcas como Louis Vuitton, Dior y Berluti no solo han brillado en el vestuario de la ceremonia de apertura, sino que Louis Vuitton, conocida por sus carteras, bolsos y maletas, diseñó el baúl para transportar la antorcha olímpica y fabricó todas las medallas y bandejas con su característico estampado.
La ceremonia de apertura se destacó por la participación de grandes artistas internacionales como Celine Dion y Lady Gaga, quienes deslumbraron con estilismos personalizados de la casa Dior. Las artistas locales Axelle Saint-Cirel, Juliette Armanet y Aya Nakamura, junto a sus bailarines, también lucieron impresionantes diseños de la maison. Además, otras grandes casas de moda contribuyeron al vestuario de los Juegos, y nuevas marcas emergentes sorprendieron con su creatividad y originalidad.
Diseños de Lujo para los Atletas
Los atletas anfitriones fueron distinguidos por los diseños de lujo de Berluti, que combinaron piezas de sastrería en azul francés con camisas blancas y solapas con un degradado en los colores de la bandera, un símbolo de elegancia nacional. Marcas tradicionales como Ralph Lauren, encargada del vestuario de los atletas estadounidenses, transmitieron claramente la identidad de la marca con una colección de estilo preppy en los colores de la bandera americana. La casa Armani, que ha diseñado los uniformes de los atletas italianos desde 2012, presentó polos y canguros en negro con detalles en blanco, rojo y verde.
Mongolia destacó por sus trajes confeccionados por Michel & Amazonka, una marca de alta costura sustentable que se volvió viral en redes sociales. Sus prendas, en los colores de la bandera nacional, combinaron cortes tradicionales y técnicas ancestrales con bordados dorados. Estos diseños hicieron alusión a la capital de los Juegos y captaron la admiración global.
Estos Juegos Olímpicos demuestran que la moda va mucho más allá de ser una cuestión de élite o superficialidad. A través de eventos de esta magnitud, observamos cómo la moda puede incluir a todos, reflejar valores diversos y ser una fuente de inspiración para la sociedad. Es fascinante ver cómo estas tendencias impactan no solo a modelos, sino también a una amplia gama de cuerpos y estilos, ampliando los límites de la moda y su influencia en nuestra cultura.